Buscando células madre viejas que se mantengan jóvenes para siempre
La anémona de mar regula las células madre mediante genes conservados evolutivamente
C: Andreas Denner und Ulrich Technau
"Vivimos tanto como nuestras células madre" es una afirmación un tanto atrevida, pero esencialmente exacta. Las células madre contribuyen a la renovación constante de diversas células y tejidos humanos, como las células sanguíneas, la piel o el cabello. Si las células madre pierden esta capacidad o su número disminuye a lo largo de la vida, el cuerpo envejece o desarrolla enfermedades. Las células madre son, por tanto, de gran interés para la investigación biomédica.
Mientras que los humanos y la mayoría de los vertebrados sólo pueden regenerar partes de ciertos órganos o extremidades, otros grupos de animales tienen mecanismos de regeneración mucho más potentes. Esta capacidad es posible gracias a las células madre pluripotentes o multipotentes, que pueden formar (diferenciar) casi todos los tipos celulares del organismo. La anémona marina Nematostella vectensis también es altamente regenerativa: puede reproducirse asexualmente por gemación y además no muestra signos de envejecimiento, lo que la convierte en un tema interesante para la investigación con células madre. Sin embargo, los investigadores aún no han podido identificar ninguna célula madre en estos animales.
Gracias al nuevo método de "genómica unicelular", Technau y su equipo pudieron identificar células de un organismo complejo basándose en sus perfiles transcriptómicos específicos y determinar a partir de qué células madre se han desarrollado. "Combinando análisis de expresión génica unicelular y transgénesis, ahora hemos podido identificar una gran población de células en la anémona de mar que forman células diferenciadas como células nerviosas y glandulares y que, por tanto, son candidatas a células madre multipotentes", explica el primer autor, Andreas Denner, de la Universidad de Viena. Hasta ahora no se habían descubierto debido a su diminuto tamaño.
Estas células madre potenciales expresan los genes nanos y piwi, muy conservados evolutivamente, que permiten el desarrollo de células germinales (espermatozoides y óvulos) en todos los animales, incluidos los humanos. Al mutar específicamente el gen nanos2 utilizando las tijeras genéticas CRISPR, los científicos también pudieron demostrar que el gen es necesario para la formación de células germinales en las anémonas de mar. También se ha demostrado en otros animales que este gen es esencial para la producción de gametos.
Esto demuestra que la función de este gen surgió hace unos 600 millones de años y se ha conservado hasta nuestros días. En futuros estudios, Ulrich Technau y su equipo quieren investigar ahora qué propiedades especiales de las células madre de la anémona de mar son responsables de su potencial inmortalidad.
Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Inglés se puede encontrar aquí.