El ántrax puede ser la siguiente herramienta en la lucha contra el cáncer de vejiga
Purdue University/R. Claudio Aguilar
Los tratamientos actuales para el cáncer de vejiga son invasivos para los pacientes, que a menudo deben permanecer sentados durante horas con la vejiga llena de un agente diseñado para destruir las células cancerosas y los tumores. El cáncer de vejiga también es uno de los más recurrentes para las personas diagnosticadas con la enfermedad.
Ahora, los investigadores de la Universidad de Purdue han encontrado una manera de combinar la toxina del ántrax con un factor de crecimiento para matar las células y los tumores del cáncer de vejiga. La investigación aparece en la edición del 4 de octubre de la revista International Journal of Cancer.
"Hemos desarrollado un método prometedor para matar las células cancerosas sin dañar las células normales de la vejiga", señaló R. Claudio Aguilar, profesor asociado y director adjunto de ciencias biológicas de la Facultad de ciencias de Purdue. "Es básicamente como crear una solución especial que se dirige a las células cancerosas mientras que deja a las células sanas en paz".
Aguilar dijo que la vejiga tiene su propia capa protectora, que salva a las células buenas de la mezcla de ántrax, pero no ofrece protección para las células cancerosas y los tumores. Dijo que el sistema Purdue funciona en cuestión de minutos, en lugar de las horas habituales para el tratamiento del cáncer de vejiga, para dirigirse a las células cancerosas de la vejiga.
"Hemos visto resultados sobresalientes con nuestro tratamiento", dijo Aguilar, quien trabaja como parte de un equipo enfocado en la identidad celular y la señalización en el Centro de Investigación del Cáncer de la Universidad de Purdue. "Es rápido y efectivo, ambos son críticos para la gente que está lidiando con esta devastadora enfermedad."
Aguilar y su grupo trabajaron con los equipos de Purdue dirigidos por Timothy Ratliff y Deborah Knapp para probar su solución en perros con cáncer de vejiga que se habían quedado sin otras opciones de tratamiento. Encontraron que este nuevo agente reducía el tamaño del tumor sin causar ningún otro efecto secundario en los animales.
El equipo de Purdue cree que un tratamiento similar puede ayudar a personas y animales con otros tipos de cáncer, incluyendo aquellos que afectan los pulmones o la piel.
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