Una nueva fuente sostenible de un prometedor anticancerígeno
Una misteriosa y rara sustancia química vegetal, posible fármaco contra el cáncer
Computer-generated image
©Cold Spring Harbor Laboratory
Los químicos del Laboratorio Cold Spring Harbor (CSHL), dirigidos por el profesor John E. Moses, han creado una forma de sintetizar JA en el laboratorio de forma segura, rápida y sostenible. Para los biólogos oncológicos del CSHL, este avance podría significar futuros tratamientos para el cáncer de mama triple negativo.
El JA es atractivo por su versatilidad. Descrita como un polifármaco, la molécula tiene la capacidad de atacar el cáncer desde múltiples ángulos. Esto puede favorecer su eficacia y reducir las posibilidades de resistencia al fármaco. "Por eso los productos naturales suelen ser un buen punto de partida para los fármacos contra el cáncer", explica Joshua Homer, investigador postdoctoral del laboratorio de Moses. "JA es una molécula sofisticada. La evolución la ha perfeccionado para nosotros".
"La naturaleza nos proporcionó el plano", añade Moses. "La naturaleza proporciona muchas moléculas que salvan vidas, pero no siempre lo hace en grandes cantidades. Pero ahora podemos acceder a la (-)-Jerantinina A a partir de una fuente comercialmente viable, que es muy barata, y fabricar este precioso material."
La JA también tiene una peculiar preferencia por matar las células cancerosas en lugar de las normales. Para averiguar por qué, los investigadores recurrieron a un colega del Centro Oncológico del CSHL, el profesor adjunto Michael Lukey. El equipo descubrió que el JA interrumpe la actividad metabólica en las mitocondrias de las células humanas de cáncer de mama triple negativo. Al inhibir las mitocondrias, el "centro neurálgico" de las células, la molécula priva a los tumores del exceso de energía y bloques de construcción que suelen demandar.
"Los requisitos metabólicos de la célula cancerosa son muy diferentes de los de la célula sana", explica Lukey. "Ahora hay una necesidad adicional de fabricar lípidos, proteínas, etc., para construir una nueva célula. Si la célula no dispone de los materiales necesarios para proliferar, puede provocar una crisis metabólica que, en última instancia, desemboque en la muerte celular."
El fácil acceso a esta nueva molécula significa que una nueva generación de fármacos puede estar en el horizonte para el cáncer de mama y potencialmente también para otros tipos de cáncer. Zifei Wang, del laboratorio Moses, encabeza ahora este esfuerzo. Su equipo considera que el viaje de JA desde una sustancia química vegetal rara y misteriosa hasta un posible candidato a fármaco contra el cáncer es un "ejemplo" de lo que puede ocurrir cuando los laboratorios de química y biología se unen en el CSHL.
"Se trata de la primera publicación en colaboración del laboratorio Moses, un grupo químico de categoría mundial, que trabaja con biólogos oncológicos del CSHL para investigar compuestos novedosos en busca de posibles propiedades anticancerígenas", afirma David Tuveson, Director del Centro Oncológico del CSHL. "¡Es emocionante ver esta sinergia en el CSHL y emblemática de las historias de éxito que vendrán en 2023!".
Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Inglés se puede encontrar aquí.